Os empiezo a decir adiós

Hacía mucho tiempo que no dedicaba unos minutos a actualizar el blog y creo que ya os debía una entrada, más que nada porque es una buena costumbre ir ordenando mis ideas y mis trabajos por aquí, para no perder nunca el norte.

La única razón por lo que no me he puesto a ello con anterioridad es porque cada día tengo menos minutos libres y que conste que no es una queja, más bien todo lo contrario.

Siempre he sido una chica capaz de hacer millones de cosas a la vez, sobre todo con la cabeza, que casi nunca me descansa, pero desde que me aventuré en este mundo literario cada día es más difícil poder abarcar todo lo que se arremolina en ella.

Oli y Alberto ya están con vosotros, llegando a vuestras casas y espero que a vuestros corazones. Para mí es una especie de alivio que ellos ya formen parte de vuestras vidas. Así liberáis un poco la carga que han supuesto para mí tenerlos en la cabeza durante los últimos meses.

Oliva: fuerte, leal y valiente. Sus circunstancias, su vida, sus anhelos y su positividad.

Alberto: Oscuro, descarado y paciente. Su pasado, sus sombras y su negatividad.

Han sido dos protagonistas muy sensibles, dos polos opuestos y a la vez dos almas gemelas. Me han encantado esas guerras dialécticas donde Alberto era descarado y Oli tímida.  Me han gustado muchas cosas de ellos y ha sido un orgullo para mí escribir su historia de amor del bueno; a fuego lento, con sentimientos y con pasión.

Con ellos han estado Sara, Rocío, Diego, Alejandro, Raúl, Rita, Eduardo… Secundarios de lujo que aportan y reconfortan, sé que sin ellos la historia se hubiera quedado coja.

Me despido de todos ellos y sé que les dejo en buenas manos. Espero que disfruten de cada rincón al que lleguen,que yo me emocionaré con cada lectora que les reciba.

Y con este último adiós y para que el ritmo no pare,comenzaré a decir un hola a mis siguientes protas: Marc y Gala, espero ser capaz de contar vuestra historia de la manera más bonita posible, para después haceros volar tan lejos como a vuestros antecesores.

Espero que me sigáis leyendo.