Siento la ausencia pero han sido unas semanas un poco caóticas.
Sí, ya puedo decir que he colocado la palabra FIN a mi tercera historia, que se convertirá en unos meses en mi cuarto libro.
Un año y un mes después de publicar Lía, aquí y ahora. Uff…Es bastante abrumador si me paro a pensarlo ¿ o no?. La verdad es que sigo creyendo que la vida son momentos y estoy aprovechando el mío, contenta y feliz.
Gala, Marc y todos sus amigos están poco a poco abandonando mi cabeza y no es fácil dejarlos marchar, pero es lo que toca, para dar paso a los siguientes, que llegarán, no lo dudo.
Ahora me queda por delante un gran trabajo para que el libro llegue a vuestras manos perfecto, con el menor número de fallos posible y con un acabado de lujo.
Sí, soy auto publicada, pero siempre intento que mis libros en papel no tengan nada que envidiar a los de las editoriales tradicionales, así que ahora tengo que ponerme a trabajar en todo ese proceso que viene después de terminar el manuscrito.
Os confesaré que los demás los envié a varias editoriales tradicionales, una me contestó con un educado no y las otras ni tan siquiera me dieron respuesta. Ahora, viendo con perspectiva todo lo que he conseguido sola, no me arrepiento de ninguno de los pasos dí; de aventurarme en este mundo literario , de saltar al vacío desde mi ignorancia y de todos los miedos que siempre acompañan a este proceso de publicación.
Gracias a todas mis lectoras por haberme dado una oportunidad, sin vosotras no hubiera sido posible nada de lo que estoy viviendo y quizás no me sentaría a darle a la tecla con tanta ilusión como lo hago ahora.
Seguiré acumulando ganas, ganas de mejorar, ganas de escribir historias cada vez más bonitas y ganas de no desaparecer en este mundo literario.
Ojalá todas vosotras también sigáis acumulando ganas de leer todo lo que sale de mi cabeza y mi corazón.
Volveré pronto con más novedades.
Sed buenas y felices.