En menos de quince días terminará el año y como soy una ansias ya he empezado a despedirme de él.
El balance es jodidamente positivo. Sin duda ha sido un año increíble para mí. Lleno de buenos momentos, de letras en forma de historias, primero paseándose por mi cabeza y después cogiendo forma en un documento word. Un año lleno de oportunidades. De conocer a muchas de mis lectoras; Sant Jordi, Madrid, de sentir su calor. De abrazos y charlas sobre mis historias de #amordelbueno. Y de risas, con ellas y con otros autores. Un año de viajes, de nuevas experiencias, de compartir mi felicidad y de disfrutar de todo lo que me está pasando, que es alucinante.
De números uno en #Amazon en USA, México, UK, Alemania, Italia, Francia y España.
De agotar ediciones en papel.
De ver a Marc y a Gala colarse en vuestros corazones y volar más lejos que nunca(Panamá, México, Argentina, Chicago…)
Sin embargo, cuento los días para dar la bienvenida al 2020, porque promete y promete mucho. Quiero seguir creciendo y exprimiendo cada cada segundo que paso en este mundo literario, aprendiendo, gozando y sintiendo. Pero los días pasan lentos y a mí me matan las ganas. Sé que se hace largo, pero confío en que la espera merezca la pena.
Mi quinto libro ya está en el horno, poniéndose bonito (precioso diría yo) para que pueda llegar a vuestras manos el 17 de marzo del año próximo, fecha que ya tengo marcada con rotulador fluorescente en mi calendario y espero que vosotras vayáis corriendo a anotarlo ahora mismo, bueno, en cuanto acabéis de leer esta entrada.
Sé que después vendrán meses cargados de nervios, de presentaciones, de difusión y exposición máxima, de intentar llegar a mil rincones más y sé también que viviré con ese acojono permanente hasta que me empiecen a llegar los primeros comentarios, pero es tan bonito todo lo que me provocáis en las tripas, que estoy dispuesta a asumir las consecuencias.
Nora y Alan son muy especiales y he dado lo mejor de mí para contar su historia. Ha sido un verdadero reto escribir con una fecha de entrega y para una editorial, pero estoy muy orgullosa de haberlo logrado.
Una vez leí que lo importante es escribir algo que te guste a ti y creo que es una verdad como un templo, así que, os confesaré que la historia de este par a mí me encanta y solo espero que a vosotras os pase lo mismo cuando os adentréis entre sus páginas.
Como último deseo pediré que pueda volver a abrazaros, a todas las que estáis conmigo desde el principio y a las nuevas que queráis conocerme. Ojalá podamos compartir un ratito de letras y firmas.
Y antes de terminar,que menuda parrafada os he metido, os voy a dejar con la imagen de un sueño. Uno que ni tan siquiera me atreví a soñar y que se ha materializado en mi vida, la que solo concibo como una acumulación de momentos.
Mi sueño no soñado.
Mi momento.
Yo ya tengo en fosforito el 17 de marzo!!! Disfruta de tu momento y prepárate para un 2020 jodidamente increíble. Porque estoy segura de que ese par (Nora y Alan) harán desplegar tus alas y volarás muy alto!!!!
Me gustaMe gusta